Bienvenidos a mi mundo, bienvenidos y hasta siempre el Erasmus.
Jamás escribí una despedida, porque a veces es muy difícil explicar en tan pocas palabras todo lo que pasa por esos momentos. Por esa cuenta atrás de dejar algo que ha cambiado tu vida, para volver a lo que siempre fue, es y será el lugar de partida. Mi tierra,mi casa, Tenerife.
Después de 7 meses en España de nuevo, quiero dejar para el recuerdo, la sensación que supongo, que muchos como yo, tendrán después de un Erasmus.
Al volver a casa, pensé que todo sería igual, o quizás hasta mejor. Pensé que sería feliz, con mi gente, mis lugares favoritos, las mejores comidas, los mejores recuerdos, etc. Pero me equivoqué.
Al volver a casa, estuve un mes sin parar, haciendo todo lo que quise hacer cuando no pude. Pero una vez, pasara ese mes de felicidad, de ver a mis amigos, de volver a lo que era mi lugar, me di cuenta de que todo había cambiado.
Poco a poco, día a día, minuto a minuto, me daba cuenta que todo ha cambiado. Y muchos ex-erasmus, sabrán a lo que me refiero, porque por lo visto, no soy la única que tiene este sentimiento de vacío, de soledad y de des-ubicación.
A veces me planteo, pero por qué? qué ha pasado? por qué todo ha cambiado tanto? he hecho algo mal?
A pesar de seguir teniendo buenos momentos con la gente que me importa. Sigo teniendo momentos de vacío.
Echo de menos el saber, el ir a la cama y estar satisfecha porque ese día aprendí una palabra nueva, una historia nueva, una curiosidad, un lugar, una comida.. algo. Simplemente, tener la sensación de que algo nuevo he aprendido o vivido.
En cambio, ahora vuelvo a España, aquí todo es igual. Y no sólo eso, es que encima, vivo en una isla, que para muchos, es enorme y sabemos que en un día es imposible verla entera. Pero a veces, se queda pequeña. No hay salida. Las salidas son muy caras. No hay escapatoria. No hay bici para pasear en momentos de preocupación..
Con esto no quiero decir que tenga cosas buenas el lugar de donde vengo.
Desde mi cabeza, todo ha cambiado. El entorno que me rodea, es diferente, ya no me gusta lo mismo que hacía antes y con la frecuencia que lo hacía antes.
Quiero dejar claro, que no se trata de que adore más lo germano, adoro mi isla, vivimos en el jodido paraíso y a veces no sabemos apreciarlo. Pero... desde que he vuelto, tengo sensaciones de no saber dónde estoy ni que quiero hacer con mi vida, ni que es lo que realmente me gusta de ella.
Hablo de cambios.
Todo ha cambiado.
Seguramente, cambié yo.
